Se estima que la temporada en el Parque Provincial Aconcagua cerrará en los últimos días del mes de febrero  y, según el balance a la fecha, la Patrulla de Rescate, dependiente del Ministerio de Seguridad, ya efectúo 90 salvatajes a andinistas por cuestiones de salud y el denominado “mal de altura”.

Cada año, en el mes de noviembre, se inician estas actividades cuando los rescatistas realizan el traslado e instalación de todos los equipos en el destacamento policial de Plaza de Mulas y se extienden hasta los primeros días de marzo, cuando el personal realiza el descenso.

El último rescate que desplegó la Patrulla se realizó el pasado domingo 3 de febrero cuando auxiliaron a  una turista oriunda de Estonia luego de descompensarse a 5500 metros sobre el nivel del mar. La mujer  fue rescatada desde el  punto de encuentro en un helicóptero y tras llegar a Horcones, se la trasladó hasta el hospital de Uspallata.

¿Qué es el Mal de altura?

También conocido como “mal de montaña”,  es una patología especialmente frecuente en personas que practican deportes de altitud, es decir, aquellas que deciden ver el mundo desde las la cima de las montañas, como la Cordillera de los Andes.

Marcelo Perez Rico, coordinador  de deportes universitarios de la UNCUYO, dijo a Unidiversidad: “Cuando el mal de altura es leve, se caracteriza por dolor de cabeza (cefalea), asociado con manifestaciones como malestar general, cansancio, debilidad, sensación de mareo y vértigo, trastornos del sueño (insomnio), molestias gastrointestinales y sensación de falta de aire”.

Sin embargo, añadió: “En los casos graves este mal de altura o mal agudo de montaña viene acompañado de un edema cerebral que es una inflamación del cerebro provocado por el cambio de presión atmosférica, lo que provoca una agudización de la sintomatología e incluso coma y muerte en pocas horas”.

La importancia de prevenir

La prevención es la forma de luchar contra el mal de altura. Esta incluye realizar ascensiones lentas, beber líquidos abundantes, especialmente agua, puesto que el respirar ambientes muy secos como los que hay a gran altura provoca una pérdida importante de los mismos. Debe evitarse la ingesta adicional de sal, así como del alcohol y tóxicos puesto que pueden empeorar el cuadro al disminuir la ventilación.

Otros consejos

• Consultar las condiciones metereológicas con antelación y por el plazo de los próximos 7 días desde el momento del ascenso.
• Informar al grupo familiar que está por realizar un ascenso a un cerro y el tiempo estimado de duración.
• Tener condiciones físicas y conocimientos técnicos adecuados para realizar la actividad.
• Tener un equipamiento adecuado.
• Realizar estudios médicos previos a la actividad física.
• Seguir las recomendaciones de los guías.