Diversos grupos opositores de las reformas que se busca implementar en la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) han difundido que, con estas enseñanzas, se "adoctrina" a menores con la supuesta "ideología de género". Sin embargo, lo que se trata en el Nivel Primario de la educación es la diversidad y el respeto por las diferencias, que incluye la aceptación de personas que se identifican con un género diferente al que se les asignó en el momento de su nacimiento y a quienes sienten atracción por personas de su mismo sexo.

Lo referido se basa en las leyes nacionales 26618 de Matrimonio Igualitario, sancionada en 2010, y 26743 de Identidad de Género, de 2012.  Además, se busca que también se respete la diversidad de pueblos originarios y de personas de otros países.

Durante el nivel primario se propone que cada niño y niña cuente, con una foto o un dibujo, cómo es su familia. La finalidad es la normalización de las familias constituidas por dos padres, dos madres o aquellas en las que sólo hay padre o madre. La idea es poner en el mismo nivel de aceptación a las familias formadas por un papá, una mamá y dos niños y/o niñas con aquellas que tienen una constitución diferente.

Ejemplo de casos con los que se analiza y trata la problemática del bullying. 

En la primaria ya se habla también de la aceptación a personas que, por ejemplo, son de otros países y tienen costumbres culturales diferentes. Se plantea el análisis de caso de una niña coreana, nueva en una escuela, que saluda a sus compañeros y compañeras con una reverencia y en otro idioma, y el resto de la clase comienza a reírse. Luego, interviene la o el docente y se explica por qué no hay que burlarse de quienes son diferentes. Se reflexiona acerca de por qué creen en la clase (real) que los y las estudiantes (ficticios) se rieron de la nueva compañera y sobre si eso está bien o mal.

Ejemplo de casos que se debaten para tratar la problemática de estereotipos de género.

También se analizan historias con un final distinto para trabajar diferentes situaciones escolares que involucren casos de discriminación o agresión vinculados con estereotipos de género, como los varones que lloran y a quienes se les dice que los hombres no lloran y sobre mujeres que no pueden jugar al fútbol, entre otros ejemplos.