La organización barrial Túpac Amaru está acampando en distintos puntos del país, en apoyo a la situación que vive esa asociación en su provincia originaria, Jujuy. Entre esas locaciones, está la Plaza Independencia, donde militantes y afiliados a la Túpac de Mendoza manifiestan su descontento con la realidad de la agrupación en la provincia norteña.

Nélida Rojas es la referente de Túpac Amarú en Mendoza, lavallina y enfermera jubilada que milita en la organización desde 2007. Ella expresó su preocupación por lo que sucede en Jujuy, ya que, dice, tienen una relación de “hermandad” con la sede de Jujuy. “Si les pasa algo a ellos, también nos está pasando a nosotros”, declaró.

Aquí Jujuy

Lo que se reclama en el norte es el diálogo con el nuevo gobierno para la continuidad del Programa de Integración Sociocomunitaria, inaugurado en 2003 durante la presidencia de Néstor Kirchner. Dicho programa permite a organizaciones como Túpac Amaru construir viviendas, o lo que sea necesario, en distintos barrios del país. Nélida viajó al norte hace 10 días para acompañar a la fundación y a su compañera, Milagro Sala, la fundadora. Advirtió que la relación entre ella y el gobernador jujeño, Gerardo Morales, es cada vez más complicada desde la campaña política para las elecciones de este año que toca su fin.

Morales ha denunciado penalmente a Sala por acampar e incluso poner piletas en la Plaza de Jujuy, y la ha tratado, a ella y a toda la organización, despectivamente. Tampoco se muestra interesado ni dispuesto a dialogar con ella sobre la continuidad del programa. De hecho, según dice Nélida, ya está creando sus propias cooperativas para intervenir con el plan de viviendas. El precio sería dejar sin trabajo a una gran cantidad de obreros, que a nivel nacional son 66 mil. Nélida Rojas manifiesta que lo que quieren es que no los lleven a violentarse, que no haya represión, que no se llegue a un nivel de agresión al que, según ella, se puede llegar.

La intención de la organización es que no se vea este tema como algo político, sino como algo humano, una herramienta para que distintas familias puedan tener sus casas. Además, aseguran que el dinero que se les otorga es bien administrado y se inspecciona y controla que se use para el fin de construir las viviendas.

La situación en Mendoza

Nélida también cuenta que en Mendoza la situación es muy distinta a la de Jujuy: Túpac Amaru ha podido dialogar abiertamente con representantes del nuevo gobierno provincial encabezado por Alfredo Cornejo, incluso tuvieron una reunión ayer con la vicegobernadora Laura Montero. Nélida asegura que era mucho más difícil poder conversar con el gobernador anterior, Francisco Pérez.

En ese sentido, desde el punto de vista provincial e incluso nacional, la referente dice que están tranquilos. No obstante, cabe señalar que el IPV le debe a la organización más de 4 millones de pesos, mientras que la municipalidad de Guaymallén le debe alrededor de 50 mil.

En Mendoza, Túpac Amaru trabaja en 10 departamentos en total: San Carlos, Tunuyán, Tupungato, Luján de Cuyo, Maipú, San Martín, Godoy Cruz, Lavalle, Las Heras y Guaymallén. En la provincia han construido 1000 viviendas y hay 300 más en proceso. Además, en Lavalle, ha hecho una fábrica textil y un jardín maternal, entre otras cosas.