Los perros callejeros son un problema cotidiano, hasta el punto de que hemos normalizado su presencia por las calles. En este marco, el Instituto de Derecho Animal del Colegio de Abogados provincial considera que el Estado no realiza campañas de esterilización. Si bien desde los municipios del Gran Mendoza se brinda asistencia gratuita, el problema los excede. Por ello, muchas organizaciones no gubernamentales cargan con esta situación sanitaria.

La Ley provincial 7603/06 declara a Mendoza como provincia no eutanásica y adopta como método de control animal la esterilización quirúrgica en todo el territorio. A partir de esa norma, los municipios de la provincia poseen móviles veterinarios.

 Aunque no existe un registro oficial, Unidiversidad realizó un estimativo sobre la base de la cantidad de esterilizaciones mensuales que se realizan en los departamentos del Gran Mendoza. Se llegó a la conclusión de que el 30% de perros castrados son callejeros. 

Desde la comuna de Godoy Cruz, se estima que la cifra de animales castrados en situacion de calle es del 20 %. En Las Heras, de 20 esterilizaciones por día, 7 perros son callejeros, por lo que alcanza el 35 %. En Luján de Cuyo, el número de perros esterilizados ronda el 15 %. Desde Guaymallén informaron que se realizan 250 operaciones mensuales y que dedican aproximadamente 10 días para realizar castraciones a perros callejeros, redondeando el 45 %. Por último, el departamento de Maipú indicó a este medio que, si bien no posee datos específicos, realiza 180 castraciones al mes, que son vehiculizadas principalmente por personas que pueden pagar el servicio.

Oscar Mellado, conocido referente y abogado miembro del Instituto de Derecho Animal, considera que desde que la ley se implementó en 2006, no se realizan las campañas de esterilización correspondientes y que, a nivel provincial, el trabajo de los móviles es insuficiente.

“Se castran 10 perros al día y nacen 100. Una perra en 7 años tiene 5600 cachorros. Esto es una cuestión de salud que involucra a los animales, al medioambiente y a las personas. Además, es fundamental abordarlo en barrios carenciados”, expresó a Unidiversidad el abogado.

Mientras tanto, desde el sector social, Virginia Ávila, integrante de la ONG Perros de la Plaza Independencia, habló con Unidiversidad y explicó que cada vez hay más abandono, maltrato e indiferencia.

“Es difícil la situación en todos lados: perros desnutridos, sarnosos, perras preñadas, cachorros abandonados. Tratamos de asistir como podemos, con alimentos, vacunas, castración y, si se puede, un hogar. Nosotros que estamos con los perros del Centro (de Ciudad) no damos más”, comentó la proteccionista.

Siguiendo a Ávila, la crisis económica hace aún más difícil su trabajo, ya que asisten a más de 60 perros en la Plaza Independencia, lugar donde trabaja la asociación. “Realizamos ferias americanas, eventos, sorteos, donaciones particulares. La crisis nos afecta y mucho. Aumentan todos los gastos, alimentos, veterinarios y guarderías. Muchas veces sale mucho dinero de nuestros bolsillos”, agregó, por último, Virginia.