Lo aseguró Cristina Rodríguez, la hermana del joven que apareció muerto en la Comisaría 27, de Godoy Cruz y que según la versión oficial se ahorcó con su propia remera. La madre se convirtió en querellante de la causa, con la representación de tres abogados de la Asociación Xumek. El fiscal de Delitos Complejos, Daniel Carniello, lidera la investigación. Confirmó que aún no recibió los resultados de la necropsia.
Gentileza Diario Los Andes/Foto: Andrés Larrovere.
“Nos mataron a todos. Sólo pedimos Justicia, que la persona que se ensañó con mi hermano pague, no queremos venganza, ni hacerle daño, sólo que pague por lo que le hizo”. Estas fueron las palabras de Cristina Rodríguez, la hermana de Leonardo Adolfo Rodríguez (30), quien apareció muerto la madrugada del 16 de enero en un calabozo de la Comisaría 27 de Godoy Cruz, y que según la versión oficial se ahorcó con su propia remera.
La hermana del joven no cree la versión que dio a los medios de comunicación el jefe de la Policía, Juan Carlos Caleri, quien aseguró que un llamado alertó a los uniformados sobre la presencia de un hombre en actitud sospechosa en el Corredor del Oeste, de Godoy Cruz, que fue trasladado en un móvil a la comisaría 27, y que lo encontraron ahorcado con su propia remera en el calabozo.
Para Cristina Rodríguez y toda su familia, la muerte de su hermano es otro caso de gatillo fácil y dio sus razones. Explicó que cuando fue a reconocer el cuerpo de Leonardo notó que tenía golpes y le faltaban cuatro uñas, que su hermano no era agresivo, que la policía se había ensañado con él, que era alegre, que tenía proyectos y que por su personalidad, nunca creerán en un suicidio.
De acuerdo a la versión oficial, Leonardo fue detenido por averiguación de antecedentes en el Corredor del Oeste en la madrugada del 16 de enero y trasladado a un calabozo de la Comisaría 27, donde alrededor de las 3 de la mañana uno de los uniformados lo encontró ahorcado con su propia remera.
Su hermana contó que se enteraron de la muerte por una sobrina que escuchó el nombre de Leonardo en un noticiero y corrió a la casa donde vivía el joven junto a dos de sus cinco hermanas, Mirna y Carolina y a su mamá, Cornelia Marilú Contreras. Fueron a la Comisaría, donde les confirmaron la muerte y luego se trasladaron al Cuerpo Médico Forense, donde pudieron ver el cuerpo.
Por los golpes que aseguró tenía el cuerpo de su hermano y por su personalidad, Cristina no cree en la versión del suicidio. “Mi hermano no era agresivo, era una persona muy amable, era músico, tenía proyectos, se iba a ir de campamento, no era un chico depresivo, todos lo conocía en el barrio”, contó.
Cristina explicó que el joven solía tocar en la calle y que a veces lo hacía con el grupo Altura. Además comentó que trabajaba en una heladería de la calle San Martín Sur, en Godoy Cruz y que antes había realizado otras tareas, desde albañil hasta atender un kiosco.
Marcha y denuncia
La familia de Leonardo realizó la semana pasada una marcha hasta la Legislatura en reclamo por el esclarecimiento de lo que consideraron como un asesinato.
En la Legislatura, los familiares y amigos del joven muerto fueron recibidos y acompañados por representantes del FIT, quienes anunciaron que presentarán un pedido de citación al ministro de Seguridad, Leonardo Comperatore, para que asista a la Casa de las Leyes la primera semana de febrero y explique qué pasó en la Comisaría 27.
Al concluir la movilización, los vecinos denunciaron que sufrieron un grave amedrentamiento por parte de la policía. La versión oficial fue otra: que algunos manifestantes ingresaron a la oficina de Ecogás con la intención de robar computadoras y que a raíz de eso se produjeron enfrentamientos entre los vecinos y la policía.
Las personas que participaron en la marcha también denunciaron lo ocurrido en la página de facebook que crearon para pedir Justicia para lo que creen fue el asesinato de un joven.
El barrio Parque Sur fue el escenario de otra tragedia: un sargento primero de la policía quien circulaba en su vehículo a contramano y en estado de ebriedad atropelló a tres adolescentes de las cuales dos murieron: Tania Páez y Lorena Castro.
Querellante particular
La investigación por la muerte del joven quedó en manos del fiscal de Delitos Complejos, Daniel Carniello, con la intención de que no sean los mismos policías de la comisaría los que lleven adelante la pesquisa.
Carniello confirmó a Edición UNCUYO que el caso está caratulado como averiguación de muerte y que aún no recibe el resultado de la necropsia que los especialistas del Cuerpo Médico Forense practicaron al cuerpo del joven. Consideró que una vez que reciba el informe y se determine la causa de la muerte analizará cómo seguirá el curso de la investigación.
El fiscal comentó que aún no tomó ningún testimonio en la causa y que por el momento se concentró en leer la información con que cuenta, que son los libros de la comisaría y la comunicación que se hizo desde esa dependencia al Centro Estratégico de Operaciones de la Policía (CEO) para informar sobre la muerte.
La mamá del joven se constituyó en querellante particular en la causa, por intermedio de los abogados de la Asociación de Xumek, Lucas Lecour, Lautaro Cruciani y Francisco Machuca.
Ser querellante en la causa les permitirá acceder al expediente, ofrecer pruebas, asistir a las audiencias, aportar testigos y acompañar pericias, entre otros actos.
El presidente de Xumek, Lucas Lecour, explicó que la intención de la asociación es continuar trabajando en la problemática de la violencia institucional, tal como hicieron al representar a las familias de Franco Díaz (asesinado por el policía Walter García Lenis, quien cumple condena perpetua) y de José Luis Bologenzi (asesinado en septiembre de 2002 y cuyo crimen quedó impune).
Respecto del caso al que actualmente están abocados, Lecour aclaró que el joven detenido no tenía una causa pendiente, tal como informaron fuentes oficiales, sino que en 2011 fue acusado de robar un celular, y que un año después el juzgado de Flagrancia lo absolvió, por lo que no tenía antecedentes.
Lautaro Cruciani de Xumek e integrante de la Campaña Nacional contra la Violencia Institucional aportó otros datos. Dijo que planteó en varias oportunidades la inconstitucionalidad de la detención por averiguación de antecedentes, que se debe explicar y asentar en los libros las razones de la “actitud sospechosa” y que en este caso el joven llevaba su documento de identidad, por lo que consideró a la detención como ilegal.
Cruciani también denunció el amedrentamiento que sufren por parte de la policía los vecinos del barrio Parque Sur, donde vivía el joven y su familia, desde que hicieron la marcha en reclamo de justicia.
Cristina Rodríguez, la hermana del joven muerto, dijo que seguirán adelante hasta saber qué le pasó a Leonardo y hasta que se haga justicia.