Desde su aparición, el COVID-19 ya provocó la muerte de más de 50 mil personas alrededor del mundo y centenas de miles de infectados. Debido a esta situación, varios países se encuentran en cuarentena y otros implementaron estrictas medidas de prevención, con el objeto de contener la propagación.

Dentro de los métodos de prevención, el primero al que recurrió la población, además del alcohol en gel, fue el del barbijo, incluso antes de que se registren casos en Argentina, lo que llevó a la Sociedad Argentina de Infectología (SADI) a desaconsejar su uso para la prevención del (coronavirus) 2019-nCoV”. Por entonces, la SADI explicó: “Los virus respiratorios, incluyendo el 2019-nCoV, no se encuentran suspendidos en el aire. Es necesario que una persona infectada con dicho virus lo elimine a través de sus secreciones, y solo estarán expuestos quienes se encuentren a corta distancia”.

Barbijo ¿cómo y cuando usarlo? pic.twitter.com/bjrlaiVmZL

— CoronaConsultas (@CoronaConsultas)

March 25, 2020

En ese sentido, el médico mendocino Luciano Ledesma le explicó a Unidiversidad que el uso de barbijo “solo se justifica cuando uno está cerca de una persona infectada con coronavirus o que posiblemente tenga el virus”.

Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Centro de Control de Enfermedades y Prevención de los Estados Unidos (CDC) y el Ministerio de Salud de la Nación no recomiendan a la población llevarlos cuando caminan por la calle, cuando van a hacer compras a un mercado, asisten a un evento deportivo o cuando, en pocas semanas, lleven a sus hijos al colegio. En esa línea, el Gobierno nacional resaltó a través de un comunicado que “solo está recomendado el uso de barbijo” para personas que “presentan síntomas de infección respiratoria: fiebre junto a tos, dolor de garganta o dificultad respiratoria”; y “personal de salud que atiende a personas con síntomas respiratorios”. Además, desde el Estado pidieron que “trabajadores y trabajadoras que atienden al público no usen barbijos”.

En contraposición a esta postura, el médico magíster en toxicología Sergio Saracco indicó que el uso de barbijos “ayudaría a reducir la propagación del coronavirus” por su función de bloqueo físico a la hora de interactuar socialmente.

Al disminuir bloqueos y permitir ciertas interacciones sociales, el uso público de barbijos simples o máscaras faciales, ayudaría a reducir sustancialmente la propagación de #COVID19 por su función de barrera física que bloquea en parte la propagación del SARS-CoV-2 pic.twitter.com/sOMf2XfchJ

— Sergio Saracco (@toxicologiamza)

April 2, 2020

Primera línea contra la pandemia: los profesionales de la salud piden ser cuidados

A la par que trabajan para la salvaguardar la salud de mendocinas y mendocinos, los médicos y médicas arriesgan su propio cuerpo. Hasta el miércoles 1 de abril, en Mendoza había 25 casos confirmados de coronavirus y dos personas fallecidas.

El mundo, en guerra por los barbijos

Decenas de países del mundo intentan hacerse con millones de barbijos lo más rápido posible en un mercado dominado por China, donde los precios suben como la espuma y donde la diplomacia entre países parece haber quedado de lado.

El gobierno regional de Madrid espera todavía dos aviones cargados de material sanitario que tenían que haber despegado desde China la semana pasada y por los que pagó 23 millones de euros. Los de Lombardía y Cataluña denunciaron intentos de estafa similares, aunque consiguieron parar la operación antes de pagar por los materiales.

Estados Unidos está pasando por encima de sus tradicionales aliados en una carrera desesperada. El gobierno alemán denunció este viernes que agentes estadounidenses habían pagado al contado en un aeropuerto de Tailandia para que un cargamento de 400 000 barbijos que debían volar a Berlín lo hicieran a Estados Unidos. Francia denunció el miércoles una situación similar cuando agentes estadounidenses habrían recomprado un cargamento de material sanitario chino que estaba ya cargado en un avión con destino a París.

Aumentó la demanda de alcohol en gel por el coronavirus

Mario Valestra, presidente del Colegio Farmacéutico de Mendoza (Cofam) informó que la demanda de barbijos disminuyó conforme la gente se informó sobre los mecanismos de prevención del coronavirus; es decir, el cuidado de la higiene personal y el lavado de manos. También explicó que aumentó la demanda de alcohol en gel.