"Hay un grupo de piratas del asfalto que está por asaltar un camión que va camino a Tucumán. Los que custodian al camión y el chofer simulan un asalto, ya lo habían hecho en la Ruta 7. El chofer se arrepiente de esto porque cree que lo van a matar. Le llama a un informante para que le avise a un fiscal. El informante está ahora preso por estafas y tiene otras dieciocho causas por estafa más. Entonces el fiscal ordena a la policía que detenga el camión.

"El chofer asustado después de llamar a su amigo con influencia en la justicia deja el camión la comisaría de Jocolí. El fiscal pide la causa manda a detener al camión y revisar a la custodia que está compuesta por dos personas con profusos antecedentes, una de ellas con 29 entradas a la policía y dos en la Penitenciaría con condenas. Los dos hombres venían con dos armas y ninguna estaba a nombre de ellos sino a nombre de dos policías que les prestaban las armas. Y el fiscal libera a los custodios y al chofer que se había arrepentido. No abre la carga, no revisa lo que había dentro del camión libera todos y se vanagloria porque frenó la comisión de un delito.

"Todo esto que les cuento, veo que ustedes abren los ojos… esto ocurrió en 2014 en Mendoza. Y el Jury lo está investigando pero cuatro o cinco miembros de la Corte, están en aspectos formales por ejemplo si correspondía o no abrir el camión o si correspondía imputarlos por las armas. Quiero decirles que a (Diego) Lagomarcino lo tienen imputado por prestarle el arma a Nisman (Alberto, el fiscal muerto violentamente) y no por el homicidio, porque no se puede prestar un arma, creo que acá hay muchos abogados y saben lo que digo.

"Esas dos personas que trabajan en empresa de en una agencia privada y que una de ellas tiene antecedentes tenía un arma prestada y no está detenida.

"La causa la tomó otro fiscal (Bancalari) y detiene a ese hombre y un juez de Garantía lo suelta porque el arma no tenía balas. O sea es difícil dar seguridad si algunos funcionarios del Poder Judicial hacen esto y si hay otros funcionarios que los cubren y si hay policías vinculados al delito y le prestan las armas a dos personas con antecedentes y a la vez esas dos personas son empleadas de una agencia de seguridad privada, va hacer muy difícil.

"Sin embargo, creo que hay mucha gente en el Poder Judicial que trabaja muy bien y también hay mucha gente en la policía que trabaja muy bien, y creo que la mayoría de los mendocinos queremos vivir en paz, y si bien hay crimen organizado en Mendoza creo que el Estado más desorganizado para combatirlo. Por eso si exigimos buenos funcionarios al Poder Judicial nos van a salir las cosas como queremos los mendocinos".