Un psiquiatra del Equipo de Abordaje de Abuso Sexual (Edeaas) aseguró que los relatos de los exalumnos son contundentes respecto de que los abusos sexuales se produjeron en el interior del Instituto Próvolo. Esto, ante una consulta de la defensora de los dos sacerdotes y el jardinero acusados sobre si era posible que los vejámenes se hubieran producido en otro ámbito.

El psiquiatra testificó en una nueva audiencia del juicio en el que están imputados por presuntos abusos sexuales los sacerdotes Nicola Corradi (83) y Horacio Corbacho (59), y el jardinero Armando Gómez (49).

El profesional primero formó parte del Cuerpo Médico Forense y actualmente se desempeña en el Edeaas. Desde ambos lugares realizó evaluaciones a varios de los denunciantes de abuso sexual e incluso los acompañó en la realización de la cámara Gesell, cuando grabaron sus testimonios.

Próvolo: directivos justificaban la rebeldía de los alumnos por su discapacidad

La mamá de una exalumna del Instituto Próvolo dijo que su hija tenía conductas atípicas, pero que nunca desconfió del lugar ni de sus autoridades porque siempre le respondían que la rebeldía de la chica estaba relacionada con su discapacidad auditiva, lo que le genera problemas de comunicación.

Veracidad y lugar de los hechos

El testimonio del psiquiatra fue extenso, duró más de dos horas en las que explicó ante los miembros del Tribunal cómo se avaluó a los chicos y chicas y cuáles fueron los resultados. Además contestó preguntas tanto de la querella como de la defensora oficial de los imputados, Alicia Arlotta.

El profesional evaluó a 5 de los 11 chicos y chicas que son los denunciantes en este primer juicio, en el que tres acusados deben responder por 28 hechos de abuso sexual y corrupción de menores.

De acuerdo al relato del querellante Leandro Lanci, ya que las audiencias son a puertas cerradas por tratarse de delitos de instancia privada, el psiquiatra ratificó la veracidad de los dichos de los exalumnos, la coherencia de los testimonios y la falta de un fin ganancial, es decir, querer obtener algo a cambio de denunciar.

Confirmaron que los relatos de exalumnos del Próvolo son veraces

Seis profesionales coincidieron en asegurar que los relatos de los chicos y chicas que denunciaron haber sufrido abusos sexuales en el Instituto Próvolo son verosímiles y coherentes. Agregaron que los exalumnos tienen secuelas psicológicas compatibles con indicadores de abuso.

Lanci comentó que el psiquiatra explicó que algunos exalumnos expresaron en los primeros encuentros lo que les ocurrió puertas adentro del Próvolo, mientras otros necesitaron acompañamiento profesional antes de poder decir lo que sucedió y posteriormente denunciarlo. El querellante relató que en la audiencia, el psiquiatra explicó en forma pormenorizada las razones por las que concluyeron que los relatos son veraces, creíbles y coherentes. También detalló las secuelas de abuso sexual que detectaron en los chicos y chicas a los que evaluaron.

Luego del relato, llegó el momento de las preguntas. La defensora oficial de los imputados le consultó si era posible que los abusos se hubieran producido en otro ámbito que no fuera el instituto. Ante esto, el psiquiatra recalcó que, en sus testimonios, los exalumnos fueron claros, ya que individualizaron tanto el lugar de los abusos, específicamente las dependencias del Próvolo, como a sus agresores.

La personalidad de Corbacho es compatible con la de un abusador

Los rasgos de personalidad del sacerdote Horacio Corbacho (59) son compatibles con los de un abusador. Así lo aseguró la psicóloga que lo evaluó, durante su testimonio en el juicio por presuntos abusos en el Instituto Próvolo. Corbacho es uno de los acusados de abuso sexual y corrupción de menores, junto con el cura Nicola Corradi (83) y el jardinero Armando Gómez (49).

Denuncia en 2008

Durante la audiencia también testificó una docente, que se desempeñó en el instituto desde 1998 hasta 2016. Siempre según el relato de Lanci, la mujer aseguró que en 2008 se enteraron por rumores de un  abuso y que lo hablaron entre las maestras, pero que no tuvieron noticias ciertas de lo que sucedió.

La maestra dijo ante el Tribunal que no conoce a los denunciantes en la causa, salvo a dos de los chicos de quienes fue maestra en  alguna oportunidad.

"Duele que me cuestionen porque creí que el Próvolo era lo mejor para mis hijos"

"Me duele que me cuestionen como mamá, porque pensé que el Próvolo era lo mejor para mis hijos. Fue tremendo hablar, pero estoy tranquila; ya hice el duelo, lloré mucho, ahora es el momento de que ellos den explicaciones".

La mujer explicó que trabajaba desde las 8.30 hasta el mediodía y que sólo en dos oportunidades acudió en otro horario para asistir a algún acto.

La denuncia a la que se refirió la maestra fue la que efectivamente realizó una mamá, primero en forma de reclamo ante los directivos y luego penalmente ante la Justicia, aunque no tuvo avances.

Lanci destacó la importancia de ambos testimonios. Dijo que el psiquiatra fue contundente, mientras que la docente acreditó que hubo un hecho preciso en 2008 y que existió un silencio cómplice que permitió que los hechos se repitieran.