Mendoza presentó ante las autoridades del Ministerio de Defensa un anteproyecto para dotar de infraestructura unas 4500 hectáreas que el Ejército posee en el Valle de Uco, con la intención de que las venda o las concesione por cien años a inversores para implantar vid.

La iniciativa fue confirmada por el ministro de Economía, Infraestructura y Energía, Enrique Vaquié, quien recalcó que la intención es rescatar esas tierras para producción, pero antes dotarlas de infraestructura de riego, utilizando para esto un crédito internacional.

Durante el Foro de Inversiones que organizó el Consejo Empresario Mendocino (CEM), Vaquié brindó detalles de la iniciativa que el gobierno provincial comenzó a delinear ni bien asumió. Explicó que, en total, el Ejército posee unas 5000 hectáreas en la zona de la Remonta, en la precordillera del Valle de Uco, y que la intención es que unas 1000 queden en manos del Ejército y el resto sean licitadas o concesionadas.

La Remonta, Valle de Uco.

Vaquié dejó en claro que tanto las autoridades del Ministerio de Defensa como las del Ejército están analizando la iniciativa, aunque aún no existen definiciones al respecto.

El Ministro aseguró que las autoridades del Ejército analizan con entusiasmo la iniciativa, teniendo en cuenta que el año pasado se modificó una norma que establecía que todos los fondos obtenidos por la venta de bienes del Ejército se destinaban al fondo común del Estado nacional. En cambio ahora –comentó– la legislación determinó que el Ejército se quedará con el 70 % del dinero y que debe utilizarlo para equipamiento.

Vaquié explicó que la intención es utilizar un crédito internacional para colocar en esos terrenos un sistema de riego y una central hidroeléctrica. Luego, los privados que accedan a las tierras deberán pagar el 60 % de ese crédito.

El Ministro comentó que el anteproyecto que presentó la provincia propone que en las ventas o concesiones tengan prioridad los empresarios mendocinos; en segundo lugar, las compañías instaladas en la Provincia –aunque sus dueños no sean locales– y que finalmente exista un cupo abierto para cualquier inversor.