La fiscal Anabel Orozco acaparó la atención de la agenda pública tras curarse de una lumbalgia aguda en las milagrosas aguas de Florianópolis, Brasil. Los estudios científicos todavía no han podido determinar la eficacia de los componentes del Océano Atlántico, pero la mendocina se adelantó y lo verificó en vivo y en directo en las últimas semanas. Ansiosa por compartir su paradisíaco viaje, subió las fotos a Facebook y ahora deberá enfrentar dos causas judiciales: una penal y otra administrativa.

En una mañana de trabajo, cuenta la leyenda que la titular de la Segunda Fiscalía Correccional comenzó a sentir molestias y fuertes dolores en su columna debido a su arduo quehacer diario en el Poder Judicial. Preocupada por su salud, asistió a un traumatólogo para alejar sus peores miedos, pero la realidad fue contundente: lumbalgia aguda. Comprometido con su responsabilidad, el profesional médico emitió un certificado pidiendo licencia por enfermedad por diez días, a contar desde el 8 de noviembre. Pero, contra todo pronóstico, Anabel Orozco acondicionó su valija, emprendió vuelo y se fue en busca de la fuente de la juventud en las maravillosas playas de Florianópolis, Brasil, que la curaron de su calvario.

El 23 de noviembre, los medios locales levantaron las fotos de la fiscal Orozco mientras disfrutaba de su viaje con sus sonrientes amigas, en restaurantes a la orilla de la playa y en cálidas noches de luna llena. No se trató de cámaras ocultas o de curiosos que la fotografiaron. La funcionaria mendocina ahorró ese esfuerzo y compartió sus vivencias en su cuenta pública de Facebook. Su espíritu de desidia se le volvió en contra y hoy es la persona más despreciada de Mendoza.

Según las imágenes paradisíacas, Anabel Orozco no sufría ninguna lumbalgia aguda, aunque el médico que firmó el certificado sostuviera que sí. Sus vacaciones de ensueño le valieron un perjuicio al Estado y, por lo tanto, a todos los mendocinos que están hartos de la inoperante y defectuosa Justicia que parece inclinarse a favor de esa conducta.

Como si no sobraran pruebas en contra de Orozco, Migraciones confirmó que el día 11 salió del país rumbo a Brasil y que el 20 de noviembre reingresó. Es que un profesional médico se había acercado a Recursos Humanos con un segundo certificado para extender la licencia por diez días adicionales y con un claro propósito: si la licencia es por 15 días corridos, debe hacerse una presentación a la junta médica del Poder Judicial para que lo avale, pero cuando es por menos tiempo, basta con que lo firme un médico particular.

Ante la gravedad de su accionar, la Procuración General del Poder Judicial inició un sumario administrativo contra la integrante del Ministerio Público Fiscal. "Es un crimen", calificó con firmeza el Procurador de la Corte, Alejandro Gullé, y prometió agilizar la investigación, en un contexto en el que los duros cuestionamientos de la comunidad hacia el Poder Judicial no cesan.

Ahora, la responsabilidad está en manos de la fiscal de Instrucción, María Mercedes Moya, quien irá por la sanción administrativa de la Procuración General y la correspondiente investigación penal por fraude a la administración pública y falsedad ideológica. Quien tampoco estará exento del caso será el médico Jorge Leiva, que firmó el pedido de licencia, y ahora deberá responder por una presunta violación al código profesional y por la dudosa autenticidad del certificado, situación común en los pasillos judiciales.

A pesar de que la fiscal está en territorio nacional, poco se sabe de su paradero. Algunas versiones aseguran que estaría en la provincia de San Luis, donde tenía previsto pasar unos días antes de reincorporarse.

¿Qué opciones le quedan a la fiscal para zafar? Cuando haga su regreso triunfal a Tribunales, podría tramitar su jubilación para posibilitar una salida sin tanto escándalo y comenzar a cobrar un salario alto con “tranquilidad”. Pero lo que todos esperan es que pueda realizarse un juicio político para destituirla de su cargo por haber mentido para irse de vacaciones. Si además el jury le quita los fueros, también será señalada por la Justicia ordinaria por el delito de falsificar documentación. Ojalá los miembros del jurado de enjuiciamiento no sufran de lumbalgia y empiecen a curar las dolencias que la sociedad padece, calla y resiste cotidianamente.

Una vieja conocida

La fiscal viajera fue la responsable de llevar adelante la investigación del trágico choque frontal entre un camión y un colectivo de pasajeros, que se produjo en la Ruta 7 de San Martín en febrero de 2014. Algunos automovilistas habían alertado al 911 acerca del chofer brasileño que conducía en contramano, pero los policías de la central telefónica ignoraron los llamados y se produjo la tragedia: 18 muertos.

La sanción para los efectivos policiales fue baja, ya que se decidió el sobreseimiento de los dos acusados por el beneficio de la duda y, para el resto, una multa de apenas 3000 pesos y la inhabilitación en sus cargos por 8 meses.
 

La escupidora de los "ñoquiteros de comité"

Anabel Orozco nunca fue un nombre popular en las oficinas del Poder Judicial, lo que le ha permitido mantener un perfil distendido en las redes sociales, incluso si se trata de criticar las cuestiones políticas de la actualidad.

En medio del polémico dietazo de los legisladores nacionales, la fiscal condenó los aumentos de sueldo por subestimar sus responsabilidades en el Congreso de la Nación. En otra oportunidad disparó contra los "ñoquiteros de comité", es decir, los militantes radicales que se juntan a debatir, y se quejó de sus salarios, del nepotismo que existe en el Estado e incluso definió a sus colegas fiscales como "títeres". ¿Ahora se escupirá ella misma?