Cieneguita Cartonera es un colectivo de trabajo que desarrolla un proyecto de comunicación alternativo basado en la creación y distribución de libros artesanales. En este sentido valoran la difusión de contenidos sociales valiosos y entienden al arte como una herramienta que es estética tanto como ética.

¿Cómo surge Cieneguita Cartonera?

Cieneguita Cartonera surge del espíritu militante de un grupo de compañeras, la mayoría del departamento de Las Heras y muchas de ellas que viven en el distrito de la cieneguita con el objetivo en alguna instancia de hacer circular la palabra haciendo hincapié sobretodo en las palabras locales y populares en un circuito que no sea el habitual de comercialización de los libros.

Surge como una propuesta alternativa pero también alterativa, es decir que provoque en la gente que acceda a estos libros nos mueva a recuperar esto que se ha perdido: el trabajar con las manos, el construir, el compartir y distribuir saberes. Porque justamente, si bien Cieneguita Cartonera tiene un grupo de compañeras que conformamos la editorial la idea es que no es la editorial solamente la que realiza los libros sino que convocamos y trabajamos con colectivos de personas. A veces con jóvenes, otras con niños, con docentes, mujeres en la construcción de los libros.  Los técnicos que hay en Cieneguita Cartonera, es decir los ilustradores, artistas plásticos,  diseñadores, ponen al servicio del colectivo su talento pero en realidad los libros son construidos por distintos colectivos que se acercan a que publiquemos su trabajo.

¿Cuánto libros han publicado hasta el momento?

Son varios, la verdad es que ha sido bastante generosa la producción. El primer libro que publicamos fue en el 2012 con una edición bastante importante porque fueron 500 ejemplares que estuvo basado en la recopilación de fragmentos de los discursos de Cristina Fernández de Kirchner. Los fragmentos fueron especialmente seleccionados en función de que poseían referencias a indicadores que queríamos remarcar. Esos libros que los realizamos con el colectivo de la “Red de Mujeres con Cristina” los presentamos en Radio Nacional (Mendoza) y verdaderamente fue bastante exitosa la presentación porque prácticamente los libros se vendieron ese mismo día, por lo que luego tuvimos que hacer algunas otras reediciones.

Otro libro que hemos publicado que tuvo 1650 ejemplares fueron los poemas de Víctor Jara, que lo hicimos con la colectividad chilena Gabriela Mistral. Con los compañeros trabajamos en los poemas de Víctor Jara y fue una dedicatoria especial de esta edición para los estudiantes chilenos en lucha (por una universidad pública) y la venta se realizó en la plaza chile el 18 de septiembre que es el aniversario de la independencia del hermano país chileno.

Publicamos también el libro “Revoltijo” con un grupo de mujeres de los barrios. Este libro es una recopilación de rondas, juegos y canciones para niños que han sido cantadas tradicionalmente en todos los lugares del mundo que las mujeres fueron recogiendo de su anecdotario personal y comunitario. Y bueno, este libro ha tenido una fuerte difusión porque además lo hemos trabajado con algunas escuelas del departamento de Las Heras y a los maestros le venido muy bien y verdaderamente estamos haciendo reediciones permanentes.

Otro que hemos presentado recientemente es un libro-disco en el que hemos incursionado en un nuevo formato para la editorial. Es un libro-disco de Gustavo Maturano y contiene los poemas del cantautor y además tiene incorporado un CD con sus temas. El libro se llama La Cuadratura del Círculo e hicimos 200 ejemplares. Fue presentado en el teatro Malvinas Argentinas del departamento de Las Heras en donde además de la presentación del libro hubo un espectáculo a cargo del autor. Trabajamos con algunos músicos en la confección del libro y con el mismo Gustavo que colaboró cosiendo las tapas y en el diseño, fue una experiencia verdaderamente increíble.

Hemos hecho también un libro de cuentos breves de una poeta mendocina, Eleonora Romero, el cual fue una edición especial y se llama “Hay Ofelia”. El material fue presentado en la feria autogestiva y la Feria del Libro. También editamos el libro “Milcayac” que nos lo proporcionó el profesor Tornello y Arturo Roig para que nosotros hiciéramos las tapas de la edición.

Hemos trabajado fuertemente también con un libro que es muy particular porque está realizado como un pergamino, un libro tugular que contiene los cuentos del subcomandante Marcos. Esta es una edición muy artesanal y creativa que ha tenido mucha aceptación en el medio.

En términos generales la producción ha sido muy fuerte, estamos trabajando mucho y estamos muy contentos. Actualmente estamos diseñando unos escritos del periodista Marcelo Padilla, también estamos trabajando con los poemas de una compañera que vive en el barrio Yapeyú que junto con gente del barrio van a hacer algunas publicaciones. Estamos realmente muy contentos porque esto es una fuente inagotable de actividades, propuestas y creatividad de compañeras que ponen su talento al servicio de ésta acción colectiva y también alternativa.

¿En qué año surge Cieneguita?

Cieneguita tiene una historia aproximadamente de dos años, sin embargo antes veníamos haciendo cosas muy circunscriptas a colectivos. En julio de 2011 con la presentación del libro “Estar Atento”, que está compuesto por fragmentos de los discursos de Cristina Fernández, la editorial sale a la luz y cobra visibilidad y cuando se enteran lo que estábamos haciendo nos invitan a participar en la Feria del Libro.

 A lo largo de estos dos años de vida participamos 15 mujeres en forma estable en todo lo que es el trabajo de la editorial y a esto se suman los colectivos de estudiantes, jóvenes, mujeres, escritores, poetas y cantautores que les interesa hacer una propuesta colectiva diferente.

Ustedes rompen con la idea del libro producido industrialmente y lo toman como algo más artesanal o artístico

Exactamente, el libro como un objeto cultura. Todo lo que hacemos lo producimos con material reciclado: las tapas son de cartón. En esto debemos decir que hemos realizado un convenio con la Organización de Recicladores de Mendoza, los cartoneros, a través del cual le compramos el cartón a ellos y ponemos algunas condiciones en la compra porque el cartón tiene que tener algunas características particulares: no tiene que estar humedecido ni poseer impresiones de adhesivos plásticos, ni doble corrugado en su interior. Vamos haciendo esto para ayudarnos mutuamente y por supuesto comprárselos a un precio mucho más alto del que ellos lo venden en el mercado. Luego las tapas y los libros los cocemos y pegamos nosotros  además de armar los lomos y por supuesto diseñamos las tapas.

Este es un trabajo absolutamente artesanal y nos hace recuperar algo que estaba como perdido, la idea de distribuir a bajo costo -en forma distinta al mercado oficial editorial que hay en la provincia- un objeto cultural que sea accesible a toda la población.

¿Qué adversidades posee la edición de libros de esta manera?

En realidad lo que más nos cuesta son las impresiones. Es en lo que más hay que invertir digamos, pero como siempre el trabajo es muy colectivo y en un marco de acuerdo con el autor entonces los gastos finalmente se terminan solucionando. Por ahí esto que hemos hecho con los recicladores en el sentido de conseguir el mejor cartón, también nosotros vamos reciclando algunas cosas. Por ahí hemos conseguido que alguna municipalidad nos banque alguna impresión de las cosas que estamos haciendo, visitamos algunas casas en donde nos donan las telas para los lomos. Es decir, vamos buscando y vamos reciclando. Nosotros siempre decimos que somos recicladores del paisaje editorial y por eso cuando la gente conoce y colabora terminamos diciendo que todos somos un poco cartoneros porque está la muestra de la solidaridad de la gente que cuando ve un objeto cultural de esta naturaleza se entusiasma.

¿Han recibido alguna cooperación o ayuda del Ministerio de Cultura actual?

De momento nada. Hemos presentado un proyecto en el Fondo de la Cultura que da un margen para que se presenten algunas editoriales autogestivas –nosotros no tenemos personería jurídica y queremos que siga siendo así por un tiempo-. El proyecto que hemos presentado es para enriquecer Cieneguita Cartonera y sólo pedimos una máquina duplicadora para las impresiones. Así que si tenemos suerte y el proyecto anda en agosto cuando se defina estaremos viendo si contamos con esto. En caso que fuera así sería un verdadero tesoro.

En algún momento Umberto Eco sostuvo que el libro era un instrumento perfecto ¿Vos cómo definirías el libro?

Yo digo que el libro es la posibilidad de seguir imaginando mundos posibles, es el acceso a un bien cultural que te permite entrar en clave de diálogo y en clave de narración a la interpretación de cosas que aparentemente en algunos casos eran inexistentes para algunos.

Creo que es el camino, el trayecto, el itinerario para poder construir nuevas formas de diálogo. Con el libro uno dialoga, uno se pone en clave de diálogo y no siempre el mismo libro le dice las mismas cosas a todos y uno no siempre interroga a los libros de la misma manera, por lo cual las posibilidades culturales son riquísimas cuando uno tiene contacto con ello.

Sobre todo cuando el libro está tan cuidadosamente armado y seleccionados inteligentemente desde los contenidos que ofrece. Además pensado desde la estética de la editorial en el sentido que por ser “alternativo” no es de segunda categoría sino que verdaderamente tiene que reunir requisitos de ética y estética. Me parece que tener un libro es tener un tesoro. Es elegir de qué manera uno quiere entrar en clave con esos mundos posibles que desde todos lugares estamos construyendo.

Correo: cieneguitacartonera@gmail.com