El sacerdote Horacio Corbacho (59) quedó más comprometido en el proceso en su contra, luego de que una ex alumna lo acusó de reiterados abusos.

El Tribunal que lleva adelante el primer juicio por presuntos abusos en el Instituto Próvolo continuó escuchando la reproducción de la declaración de una testigo de identidad reservada, que se grabó en varias oportunidades durante 2017 y que en total tiene una duración de 9 horas.

La joven, que actualmente tiene 29 años, dijo que el sacerdote Corbacho abusó de ella en tres oportunidades y señaló a la religiosa Kumiko Kosaka (imputada en otra causa) como facilitadora de uno de los vejámenes, ya que la envió a la habitación del cura.

Próvolo: juzgan a dos curas y a exempleado por 28 hechos de abuso y corrupción

El lunes a las 8.30 comenzará el juicio contra los sacerdotes Nicola Corradi (83) y Horacio Corbacho (59) y el administrativo y jardinero Armando Gómez (49), acusados de cometer 28 delitos de abuso sexual y corrupción de menores contra 20 exalumnos del Instituto Antonio Próvolo de Mendoza, una institución dedicada a la educación de niños y niñas sordos en todo el mundo.

De los tres acusados en este primer juicio, el sacerdote Corbacho es quien debe responder por más delitos, ya que está acusado de cometer 16 abusos sexuales, 8 de los cuales serían violaciones. 

De acuerdo a los datos aportados por los querellantes, Sergio Salinas y Oscar Barrera, ya que por tratarse de delitos de instancia privada las audiencias son a puertas cerradas, la joven aseguró que en una oportunidad otro de los imputados -el jardinero Armando Gómez (49)- intentó abusar de ella, pero contó que logró escapar de su agresor.

La exalumna también relató que en distintas oportunidades ayudó y asistió a otras compañeras, luego de que ellas sufrieran abusos por parte de los imputados.

En cuanto al tercer imputado, el sacerdote Nicola Corradi (83), la chica expresó que era el jefe en el Instituto, el que mandaba a los demás.

Próvolo: "El juicio es una forma de procesar el trauma"

Para los sobrevivientes del Instituto Próvolo el juicio que se realiza contra dos sacerdotes y un jardinero por abuso sexual es una forma de procesar el trauma, una posibilidad de reivindicación y de reestablecer el lazo con la comunidad.

Cinco testimonios

El juicio continuará el jueves, ya que mañana (miércoles 18) no habrá debate debido a problemas de agenda de los magistrados, según informaron desde la oficina de prensa del Poder Judicial.

El jueves las partes continuarán escuchando la reproducción de la declaración de la testigo de identidad reservada. Luego está previsto que la próxima semana sigan con los 5 testimonios que faltan de los exalumnos, 2 serán con la modalidad de cámara Gesell en vivo y los 3 restantes se reproducirán ya que fueron grabados durante el proceso de la investigación.

Hasta el momento, el tribunal escuchó a 15 testigos, 13 exalumnos, además de una psicóloga del Equipo de Abordaje de Abusos Sexuales (Edeaas) y de Patricia Gorra, del Departamento Neurociencias, de la UNC, que fue quien realizó la evaluación a uno de los acusados, Armando Gómez.