Los integrantes del Jury de Enjuiciamiento volvieron a dilatar la decisión de fondo respecto de la denuncia que pesa sobre el fiscal Daniel Carniello. Sus integrantes decidieron, por unanimidad, otorgar diez días al acusado para que responda a la ampliación de la denuncia que hizo el procurador subrogante, Darío Tagua, basada en una nota periodística.

La mañana del 4 de agosto empezó movida en Tribunales. El Jury debía reunirse a las 9, pero el encuentro se atrasó dos horas porque más temprano hubo una amenaza de bomba en el cuarto piso y el edificio fue evacuado hasta que la Policía confirmó que no había peligro.

El encuentro de los integrantes del Jury duró poco. Los seis miembros de la Suprema Corte –ya que Herman Salvini está enfermo y, según dicta la norma, fue reemplazado por Alejandra Orbeli, de una cámara civil–, siete diputados y siete senadores votaron por unanimidad otorgar diez días hábiles a Carniello, para asegurar su derecho a defensa ante la nueva presentación de Tagua. Es decir, volverán a reunirse en un mes.
 

El proceso contra Carniello

Esta es la tercera vez que los miembros del Jury analizan una denuncia contra Carniello, que fue fiscal de Delitos Complejos durante años, hasta que fue desplazado por el actual Procurador de la Corte, Rodolfo González (quién ya anunció que se jubilará) a la fiscalía de Guaymallén.

La primera denuncia ante el Jury se basó en una presentación que hizo la Justicia Federal ante el procurador González –el jefe de los fiscales– para que analizara si existían irregularidades en unas escuchas telefónicas en las que Carniello hablaba con un informante, Enzo Stuto, que tenía causas pendientes con la Justicia. Después de siete meses, González envió la causa a la Fiscalía de Capital, para que investigue, y desplazó a Carniello (de quien es exsuegro).

Es decir que se abrió una investigación administrativa –la del Jury– y otra penal que quedó en manos de la Fiscalía de Instrucción 19, a cargo de Gustavo Pirrello, bajo la sospecha de que Carniello benefició a Stuto en causas que el informante tenía abiertas. Con la intención de imputar a Carniello, Pirello solicitó el desafuero del fiscal ante el Jury, pero sus integrantes rechazaron el pedido.

Luego, el Jury rechazó la denuncia por las escuchas telefónicas. Fue en ese momento cuando Tagua amplió su presentación. El meollo de la cuestión fue que en 2014 el ya mencionado Stuto le advirtió al fiscal que podría ser robada la carga de un camión que se trasladaba desde Tucumán a Mendoza. Carniello ordenó que detuvieran al vehículo a la altura de la Jocolí, pero Tagua lo acusó de no abrir una causa por las armas que llevaban los dos custodios de la carga, que se trasladaban en otro auto, ya que los dejó libres y les devolvió el armamento. El Jury entendió que no era una ampliación de denuncia sino otra causa, por lo que abrió la tercera instancia.

El proceso que enfrenta ahora el fiscal es por no haber abierto una causa a quienes portaban las armas y por haberlas devuelto. Pero la semana pasada la novela Carniello tuvo su capítulo estelar cuando el propio gobernador Alfredo Cornejo pidió su renuncia, lo acusó de no investigar un delito y de dejar libres a personas que tenían muchas causas pendientes con la Justicia.

El capítulo siguiente fue que Tagua realizó una ampliación de la denuncia que consta de una hoja y cuya única prueba es una nota del diario MDZ Online. El procurador subrogante puso en el tapete recién ahora el tema del robo del camión que el informante le advirtió a Carniello que sucedería, algo que llama la atención porque este tema aparece en la causa desde el principio. Frente a esta presentación es que el Jury le otorgó diez días al acusado para defenderse.
 

El papel de Cornejo

Luego de la votación, el diputado del Frente para Victoria Lucas Ilardo y el senador radical Juan Carlos Jaliff explicaron que se volverán a reunir en un mes, cuando se cumplan los diez días hábiles para que Carniello conteste.

Además de detalles sobre el proceso, ambos legisladores dejaron en claro sus posturas. Ilardo aseguró que la ampliación de la denuncia de Tagua no es tal, porque sólo presentó un artículo del diario MDZ Online que habla sobre la advertencia acerca un posible robo, lo que ya estaba en la causa. Pese a esto, dijo que buscaron asegurar el derecho de defensa de Carniello permitiéndole contestar a la misma.

Ilardo también criticó los dichos del gobernador. Dijo que Cornejo tropezó con su propia soberbia, que el Jury es un órgano institucional, independiente y que el mandatario debería respetar una de las banderas de su campaña, que fue la defensa de las instituciones. “Que un gobernador esté exigiendo una renuncia o involucrándose sobre lo que debe decidir un Jury es realmente peligroso para las instituciones de Mendoza, no es prudente”, fueron sus palabras.

Del otro lado, Jaliff opinó lo contrario. Dijo que el mandatario tiene todo el derecho de opinar sobre temas que importan a los mendocinos y aseguró que no genera ningún ruido institucional que el mandatario pida la renuncia de un fiscal que está sometido al proceso del Jury.

Tal como planteó el periodista Jorge Fernández Rojas en una nota de Unidiversidad, la embestida del gobernador se enmarca en la pulseada política que mantiene con la Suprema Corte y que se inició ni bien asumió, cuando los supremos aceptaron un Habeas corpus relacionado con las prisiones preventivas, a lo que se sumó el paquete de leyes que impulsa el Ejecutivo y que buscan reformar el Código Procesal Penal.