Los vehículos eléctricos avanzan a pasos agigantados a nivel mundial y se están desarrollando a gran velocidad. No obstante, en nuestro país, la crisis energética y la falta de inversiones hace que esta tecnología quede demorada.

En consecuencia, la provincia de Mendoza se encuentra rezagada a la hora de pensar un plan estratégico para la electromovilidad. es decir, los autos eléctricos. Para ello, el principal obstáculo que aún enfrenta nuestra provincia está relacionado con las estaciones de carga, prácticamente inexistentes.

Desde Unidiversidad nos comunicamos con el ingeniero Amílcar Barletta, secretario general del Instituto de Energía de la UNCUYO, que nos brindó un extenso panorama de la situación provincial y nacional.

“Argentina, y particularmente la provincia de Mendoza, están obligados a pensar a corto plazo la posibilidad de implementar los vehículos eléctricos, ya que la problemática en el transporte actual y la conservación del medio ambiente son fundamentales para prevenir la emisión de gases tóxicos que afecten aún más el cambio climático”, destacó Barletta.

En este sentido, el ingeniero de la UNCUYO remarcó: “En nuestro país, se está tardando más en implementar esta tecnología que en el resto del mundo (especialmente Europa), puesto que los costos de fabricación son mucho más altos. Un claro ejemplo lo encontramos con las terminales de carga, que hay que pensar adecuadamente. En Buenos Aires ya existe la posibilidad de cargar los vehículos eléctricos en la calle, pero en Mendoza todavía esa posibilidad no está aplicada y parece que va llevar algún tiempo implementarla, producto de la actual situación económica”.

Crisis energética

Actualmente, nuestro país cuenta con una deficiente infraestructura en materia energética. A esto debemos sumarle los reiterados cortes de suministro eléctrico por sobrecargas, lo que plantea un panorama poco alentador para lo que viene.

“Habría que redistribuir y repensar la cuestión energética, puesto que no tenemos un problema de falta de energía, sino que no la sabemos administrar y terminamos derrochándola. En nuestro país estamos muy mal acostumbrados a dejar los aparatos electrónicos enchufados, a dejar las luces encendidas y a no entender que la energía tiene un costo”, afirmó el ingeniero.

Alumnos mendocinos ganaron una beca para crear un auto eléctrico

Se trata de estudiantes de la Gabriel Del Mazo. El vehículo competirá en una carrera en Buenos Aires enmarcada en el proyecto "Desafío Eco YPF", que promueven el uso de energías sustentables.

“Lamentablemente, creo que por el momento nuestro país no se encuentra preparado energéticamente para soportar una gran cantidad de estos vehículos, pero es allí donde debemos apuntar si queremos producir un cambio a futuro”, continuó.

Contraparte negativa

La ventaja de los vehículos eléctricos con respecto al medio ambiente es muy amplia si la comparamos con los vehículos de combustión fósil (naftas), ya que estos vehículos no aportan monóxido de carbono a la atmósfera, por lo que ayudaría a contrarrestar el efecto invernadero producido por el calentamiento global.

Sin embargo, la implementación de esta tecnología conlleva a una problemática en cuanto a los residuos contaminantes. “La contraparte negativa que tiene la implementación de los vehículos eléctricos (autos, motos, colectivos y bicicletas) refiere a que, en una menor proporción, figuran como una forma de energía contaminante, puesto que las recargas de las baterías de litio, los ácidos que contienen dentro y el mal desecho de estas afectan gravemente al ecosistema”, finalizó Barletta.

Bajo estas condiciones, se espera que el mercado de vehículos híbridos-enchufables vea su despegue masivo en Argentina para el 2025.

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