A partir de la polémica desatada por algunos sectores en contra de la efectivización de la Ley de Educación Sexual Integral (ESI), vale la pena profundizar en el modo en el cual se abordan diversos contenidos en las aulas. Los principales cuestionamientos son a cómo se enseña a niños y niñas del nivel inicial a conocer su propio cuerpo y a saber decir "no". Estos aprendizajes resultan fundamentales para prevenir abusos sexuales, especialmente en los y las menores.

Los contenidos que se incluyen para la ESI de Nivel Inicial son: conocimientos y cuidados del cuerpo, desarrollo de competencias y habilidades psicosociales, desarrollo de comportamientos de autoprotección y el conocimiento y exploración del contexto. Uno de los ejemplos de actividades propuestas es que el niño o la niña, con sus familiares, busquen cuatro o cinco fotos en distintas etapas de su crecimiento: desde que nacieron hasta el presente.

Captura de pantalla del cuadernillo de ESI para docentes del nivel inicial.

Posteriormente, se hacen preguntas como “¿Cuántos años tenías?”; “¿Qué estabas haciendo?”; “¿Qué tenías puesto?”, entre otras. El objetivo es que cada niño o niña pueda observar y reconocer los cambios y permanencias en sus cuerpos con el paso del tiempo. En relación con este mismo eje, también se sugiere que alumnos y alumnas se dibujen a sí mismos para que el o la docente sepan cómo se autoperciben.

A partir de ese punto, se recomienda, por ejemplo, el trabajo con pinturas de desnudos, ya que es una opción adecuada y socialmente aceptada para que niños y niñas aprendan sobre las partes del cuerpo humano masculino y femenino. Contrariamente a lo que los sectores que se oponen a la ESI divulgan, en el cuadernillo se deja en claro que no deben usarse fotografías de desnudos y, mucho menos aún, de menores, ya que eso sería considerado pornografía infantil.

La curiosidad por los embarazos

Por otro lado, debido a que en esa etapa los niños y las niñas comienzan a hacer preguntas sobre embarazos, se propone invitar a una mujer embarazada para que muestre su panza, cuente su experiencia, muestre cómo se mueve el bebé dentro de ella, entre otras cosas. También se sugiere la lectura de cuentos sobre el nacimiento de un bebé y sobre las familias que tienen hijos o hijas adoptados. Los cuadernillos incluyen recomendaciones de lecturas infantiles específicas sobre estos temas.

Además, se busca desmitificar la historia del bebé que fue “traído por la cigüeña” o de que “nació de un repollo”. Para eso, se recomienda hablar del sistema reproductivo y de las relaciones sexuales basadas en el afecto. Se sugiere explicarlo de una manera relativamente similar a esta: “Cuando los varones y las mujeres crecemos, cambian nuestros cuerpos, nuestros gustos y la forma de relacionarnos. Las maneras de demostrarse y recibir amor en las parejas pueden ser también por medio de las relaciones sexuales o de ‘hacer el amor’.Cuando las parejas hacen el amor, se abrazan, se acarician y sus cuerpos y sus partes íntimas se juntan”.

Resolver situaciones

Por otro lado, es en esta etapa en la que se sugiere el análisis de situaciones y el planteo de resolución de conflictos. Por ejemplo: “Una nena está parada en la sala. Se acerca un nene y le da un beso. La nena se enoja y se molesta”. Luego se reflexiona sobre la actitud del nene y la de la nena y se discute si está bien darle un beso a alguien "por sorpresa”.

Otras de las opciones son cantar canciones sobre cómo uno o una es (por ejemplo, "Me miro en el espejo", de Hugo Midón y Carlos Gianni) y se invita a niños y niñas a hacer su propia canción sobre cómo son para reconocerse y quererse con sus características. Se aconseja que el o la docente lo haga primero para animar a estudiantes.